Hugo Rafael -Esteban para algunos, El Comandante para otros- debe estar feliz. Aunque en las encuestas de opinión pública, de todas las índoles, se continúa evidenciado el desgate político de su gobierno a causa de problemas estructurales como la delincuencia o el suministro eléctrico, su triunfo el 26 de septiembre se continúa consolidando. Por esta camino se concretarán los análisis que sugerían a comienzas de año que Chávez mantendría el control de la Asamblea Nacional a pesar de no contar con la mayoría de los votos.
¿Es posible? Vamos a retomar un ejemplo hipotético que empleamos en estas líneas el año pasado: Supongamos que la oposición se presenta dividida en dos bloques a la elección parlamentaria de 2010. Supongamos que el bloque A obtiene 33,33% de los votos, mientras el bloque B de la oposición capitaliza 33,32% de los votos. En total 66,65% de los sufragios válidos, lo que reduciría al chavismo -en este hipotético escenario- a 33,35% de los votos.
Como el nuevo sistema electoral beneficia al bloque mayoritario, la votación del chavismo equivaldría a 82,93% de las curules de la Asamblea Nacional.
Es decir, la oposición con 66,65% de los votos se quedaría con 4 curules ganados por el bloque B y 24 capitalizados por los candidatos del bloque A, mientras 136 curules serían ganados por Chávez a pesar de solo obtener 33,35% de los votos válidos.
La posibilidad de que la oposición se presente dividida el 26 de septiembre comenzó a tomar cuerpo en Semana Santa cuando Yon Goicoechea por fin entendió que su partido entregaría su cabeza a UNT -perdón su candidatura- para garantizar que no se cuestione la aspiración de Juan Carlos Caldera en Petare y la supremacía de Julio Borges en la lista de candidatos por Miranda. Una negociación muy normal, de no ser porque ahora Goicochea, junto a Capriles Radonsky abrieron la posibilidad de que todo aquel que esté descontento pida elecciones primarias. Y descontentos deben estar, al menos, 1.500 precandidatos.
Que nadie se engañe. El primer convencido de que los candidatos de la unidad debieron escogerse por primarias, evitando a los cogollos soy yo. No hay que ser un erudito en el análisis político para descubrir que todos los partidos jugaron a matar las primarias para garantizar que los suyos -y nadie más- llegue a la Asamblea Nacional.
Seamos aún más sinceros, en estas negociaciones comienza a "pactarse" la candidatura presidencial de 2012. ¿Alguien lo duda? De ahí la imposibilidad de lograr acuerdos.
Soy de la tesis que los candidatos de partidos les costará Dios y su ayuda conectar con los Ni-Ni y fomentar la abstención dentro del chavismo. Sin embargo, es lo único que hay sin atentar contra la frágil unidad que se ha construido en estos días.
Por esta razón, a esta altura del partido, mi principal aspiración es una quimera y suponer que se puede concretar traería más problemas de los que puede resolver.
Al dilema Goicoechea se une la campaña -vía twitter inicialmente- del grupo de Augusto Uribe, Tulio Álvarez y todos los integrantes de 100% Primarias que aseguran que el 23 de mayo se realizarán primarias nacionales para elegir a los candidatos de la oposición, y que estos candidatos desplazarán a los escogidos por los cogollos.
No voy a entrar a valorar la manipulación de sus notas de prensa asegurando que el CNE les aprobó las primarias cuando el propio rector Vicente Díaz lo desmiente. Por ahora es una manipulación, no obstante me pregunto: ¿Y si negociaron esas primarias a espaldas de Díaz con el resto de las rectoras? Básicamente nada conviene más al chavismo que se concrete la elección de dos tipos de candidatos entre la oposición, así se concretaría el ejemplo hipotético que colocamos en las líneas precedentes.
No dudo que el impasse por la cabeza de Goicoechea se podrá solucionar en las próximas horas. Me preocupa más que se concrete alguna de esas primarias alternativas del 23 de mayo, porque eso significará, que la última opción de la oposición por ganar la Asamblea Nacional se pierda. Una vez más, Chávez está próximo a ganar la Asamblea Nacional porque los egos de la oposición no logran pactar unidad.
1 comentario:
Qué lastima que lo que tú y otros analistas ven de forma tan clara, la MUD no lo ve. Es tan cierto el refrán popular de "no hay más ciego que el que no quiere ver"...
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